Aunque su uso cotidiano se restrinja a las ensaladas, una de las propiedades de la lechuga es la de formar parte de las solanáceas psicoactivas. La lechuga es un hipnótico. Las hojas secas de lechuga y el cocimiento de los troncos de ésta hacen que sea un hipnótico proporcional a la cantidad de vegetal reducido (cocido o hervido). En la cultura mediterránea se recomendaba este jugo para "soñar".
Puedes utilizarla para otras cosas que no sean acompañar aburridas ensaladas. La lechuga está categorizada como una sustancia psicoactiva por su composición química. Antiguamente, en la cultura de los países con costas al Mar Mediterráneo los chamanes de las tribus que habitan allí, “recetaban” lechuga a personas que no podían dormir. Ésta los hacía caer en un leve estado hipnótico que les ayudaba a lograr los efectos deseados.
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