Hace unas semanas, la policía de Phoenix, durante su ronda de vigilancia, olió a marihuana procedente de un coche que circulaba por delante de ellos con las ventanillas bajadas.
Fue alrededor de las nueve de la tarde cuando el oficial se percató del olorcillo de la marihuana en todo Ninth Street y Bell Road.
"Cuando me acerqué al vehículo, que desprendía un fuerte olor a marihuana procedente de su interior, aunque yo no vi nada a la vista", una declaración probable causa-dice. "Le dije al conductor que debía mantener la ventana bajada y que condujera aproximadamente 20 pies para salir del drive-thru de Burger King."
El conductor, de 25 años de edad, Alberto Reyna, le dijo al oficial que él no tenía marihuana y dijo que no tenía el derecho de revisar el vehículo, tampoco.
El oficial detuvo a Reyna e hizo que su acompañante, de 23 años de edad, Stephanie Lopez, saliera del coche y se sentansen ambos en la acera.
Mientras el oficial, sin éxito, buscó la marihuana dentro del coche, la mujer hizo una "declaración espontánea", exponiendo que la marihuana estaba en sus pantalones, según los documentos.
Efectivamente, la mujer sacó una bolsa de hierba y un tubo de vidrio de su vagina y se las entregó al agente.
Fuente: blogs.phoenixnewtimes.com
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