Las autoflorecientes feminizadas al fin cambiaron.
Las variedades autoflorecientes de cannabis llegaron al
mercado hace unos cinco años pero sólo han causado un gran impacto en
los últimos dos años. Una de las razones claves por las se han vuelto tan populares es porque se puede sacar en muy poco tiempo grandes cantidades.
Las variedades AutoFem tienen la capacidad de florecer bajo veinte horas
de luz diarias y pueden hacer grandes floraciones en muy poco tiempo,
llegando a superar a las variedades tradicionales.
En el último par de
años las variedades de Dutch Passion más populares han superado en
ventas a algunas de sus variedades tradicionales más vendidas, seguro
que otros bancos de semillas de calidad han observado las mismas
tendencias con sus autoflorecientes.
La popularización de las variedades
AutoFem ha sido más rápida de lo que nadie predijo. De hecho, no creo
que ni siquiera los fans más entusiastas de las autoflorecientes
esperaran unos resultados tan buenos, tras sólo cinco años criando y
afinando las variedades. El ascenso de las variedades AutoFem ha
sorprendido tanto a sus defensores, como a sus detractores.
Hoy en día muchos cultivadores te dirán que los
bancos de semillas de calidad ofrecen variedades AutoFem con niveles de
potencia similares a los de las variedades tradicionales de cannabis de
calidad. Niveles de THC altos no son raros en las buenas AutoFem. No
sólo eso, además los bancos de semillas han conseguido refinar las
genéticas para producir cosechas más grandes.
Actualmente, una planta
autofloreciente bien cultivada tiene el aspecto, huele, sabe y se fuma
igual que una variedad tradicional de calidad. Los días en que las AutoFem eran plantas
larguiruchas que producían diez gramos de cogollos de potencia media
hace tiempo que acabaron.
Fuente: Cannabis.info
Editado por: Irie Grow Shop
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